Consejo de Seguridad alerta las condiciones humanitarias en Gaza

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Los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU pidieron un aumento de la ayuda humanitaria a Gaza, advirtiendo del deterioro de las condiciones en la Franja.

Ayer lunes por la tarde se celebró una sesión del Consejo de Seguridad a alto nivel diplomático, a petición de Gran Bretaña, bajo el título “Poner fin a la guerra y establecer una paz duradera”.

El enviado del Secretario General de la ONU para el proceso de paz en Oriente Medio, Tor Wensland, afirmó que la región ha llegado a una encrucijada sombría, más de un año después de la extensión del conflicto en Gaza y del derramamiento de sangre, y apeló a la comunidad internacional a actuar rápidamente para detener esto y cambiar de rumbo.

Las declaraciones del funcionario de la ONU se produjeron ante el Consejo de Seguridad en Nueva York durante una sesión presidida por el secretario de Asuntos Exteriores británico, David Lammy, cuyo país presidió el Consejo de Seguridad durante este mes.

En la nota preparatoria de la reunión, el Reino Unido indicó que decidió centrarse en la reunión y celebrarla a nivel de ministros de Asuntos Exteriores en el convencimiento de que “poner fin al conflicto en Gaza y el Líbano es una prioridad urgente, con la necesidad de centrarse en reducir la escalada regional más amplia deteniendo el flujo de armas a actores no estatales y poniendo fin a los ataques hutíes en el Mar Rojo”.

Por su parte, el enviado de la ONU, Wensland, se centró inicialmente en la situación humanitaria y la describió como una pesadilla, señalando que la guerra israelí “causó una destrucción generalizada y enormes pérdidas”.

Describió la situación humanitaria en Gaza como catastrófica, específicamente en el norte de Gaza, y describió lo que está sucediendo como “aparentemente un preocupante desprecio por el derecho internacional humanitario... Gaza está presenciando las peores condiciones desde el comienzo de la guerra, y no esperamos que mejoren pronto”.

Winsland también se refirió a “la violencia y la desesperación presenciadas en Cisjordania”. Llamó la atención sobre la continuación de las operaciones militares israelíes en ciudades y campos palestinos en Cisjordania, lo que aumenta las tensiones. Advirtió contra la continuación de las operaciones de asentamiento y señaló que las autoridades de ocupación habían adoptado muchas medidas para acelerar sus operaciones de asentamiento.

El funcionario de la ONU advirtió sobre las consecuencias de la decisión israelí y la adopción por parte de Israel de leyes que prohíben las operaciones de la UNRWA. Y añadió: “En consecuencia, debo advertir urgentemente que el marco institucional para apoyar al pueblo palestino y al Estado palestino está al borde del colapso, lo que amenaza con hundir los territorios palestinos ocupados en un caos mayor”.