❞Distintos informes de ONGs de Europa informan que las fuerzas de ocupación israelíes cometieron 652 violaciones de los derechos humanos en Al-Quds Jerusalén durante el mes de noviembre, categorizadas en 16 tipos. Estas violaciones fueron principalmente incursiones e invasiones, que representaron el 55,8% de los incidentes, seguidas de arrestos con un 9,5%.
El informe concluye advirtiendo de la gravedad de las violaciones que se están cometiendo en Al-Quds Jerusalén, en particular la agresión desenfrenada de los colonos extremistas contra los ciudadanos y los intentos de imponer nuevas realidades en la mezquita de Al-Aqsa, incluida su división temporal y espacial. Las escaladas de la ocupación en Al-Quds Jerusalén, bajo el pretexto de su guerra contra Gaza, siguen exacerbando el sufrimiento de los habitantes de Al-Quds Jerusalén al tiempo que impulsan los esfuerzos de judaización.
Las violaciones en Al-Quds Jerusalén, documentó 35 incidentes de disparos y ataques directos por parte de las fuerzas israelíes en barrios de toda Al-Quds Jerusalén ocupada.
El informe registró la muerte del anciano jerosolimitano Ahmad Misbah, del barrio de Ras Al-Amud, quien falleció a causa de sus heridas tras ser atropellado por un colono el 21 de noviembre. Además, 17 jerosolimitanos resultaron heridos y decenas sufrieron la inhalación de gases lacrimógenos como resultado de los ataques de las fuerzas israelíes. Al menos 16 personas fueron sometidas a agresiones físicas y malos tratos.
Las fuerzas israelíes realizaron 364 redadas en ciudades y barrios de Al-Quds Jerusalén y arrestaron a 62 personas, entre ellas siete niños y cinco mujeres. Cuatro personas fueron citadas a declarar y otras dos fueron puestas bajo arresto domiciliario.
Demoliciones de viviendas y desplazamientos
El informe destacó 31 operaciones de demolición y destrucción de 20 viviendas, ocho de las cuales fueron demolidas por sus propios propietarios, dejando a 103 personas sin hogar. También documentó la destrucción de 10 estructuras, incluida una mezquita, y la emisión de 22 órdenes de demolición de viviendas y otras estructuras.
Las fuerzas israelíes confiscaron equipos agrícolas de una parcela de tierra en la aldea de Beit Surik, impidiendo a los residentes palestinos utilizar la tierra.
Cambios demográficos y expansión de los asentamientos
El informe destaca que las autoridades israelíes están trabajando sistemáticamente para imponer cambios demográficos en Al-Quds Jerusalén, utilizando los aparatos gubernamentales, políticos y de seguridad. Además, los colonos y sus organizaciones tienen vía libre para apoderarse de tantas propiedades como sea posible en la ciudad.
El informe documentó cuatro decisiones clave para intensificar los esfuerzos de asentamiento y judaización en la Jerusalén ocupada, incluidos los planes para un nuevo barrio de asentamientos en tierras del aeropuerto de Qalandia, la construcción de 760 unidades de asentamiento en el oeste de Al-Quds Jerusalén y la aprobación de un proyecto para desarrollar un complejo en el barrio de Rasko, al sur del centro de Al-Quds Jerusalén, que incluye 292 unidades de vivienda.
El ataque a la mezquita de Al-Aqsa
El informe señaló la participación de 3.642 colonos, junto con miles de personas etiquetadas como "turistas", en el asalto a la mezquita de Al-Aqsa durante 19 días en noviembre. Se observaron otras seis violaciones notables, incluidos los llamamientos a demoler la mezquita de Al-Aqsa y la realización de rituales talmúdicos en sus patios.
Las autoridades israelíes continuaron con su política de prohibir el acceso a la mezquita Al-Aqsa y a la ciudad de Al-Quds Jerusalén. Durante el mes se dictaron cuatro órdenes de destierro contra habitantes de Al-Quds Jerusalén.
Violencia de los colonos
Los colonos perpetraron cinco ataques contra residentes de Al-Quds Jerusalén en noviembre, incluido el incidente fatal que involucró al anciano.
Las fuerzas israelíes mantuvieron un bloqueo asfixiante sobre las ciudades y barrios palestinos de Al-Quds Jerusalén y restringieron el acceso a los palestinos de Cisjordania y Gaza. También continuaron sus ataques a las libertades públicas e impidieron el trabajo de los periodistas en la ciudad ocupada.
El informe destaca la continua violación de los derechos económicos, sociales y culturales de los habitantes de Al-Quds Jerusalén. Durante el mes se impusieron numerosas multas y sanciones a los propietarios de empresas.
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